9 nov 2013

Esjatologia. Apocalipsis. Parte X.

LA MUJER Y EL DRAGON: EL MISTERIO DE LA NATIVIDAD DEL SEÑOR.

El Capitulo XI del Apocalipsis termina con la Parusía. El Señor establece que la humanidad herida por el pecado ira desde la desobediencia hasta la Apostasía y de la Apostasía le será fácil establecer una falsa filosofía y un falso Dios. El ateísmo no es otra cosa sino la idolatría del hombre para el hombre, del humanismo sin Dios. Dios establece que eso será castigado, pero antes, san Juan explica la Salvación de la Humanidad. Revela en símbolos esjatologicos el principio de la Salvación.

La Primer Gran Señal: Del Arca de la Alianza a La Mujer vestida de Sol.

Y se abrió el Santuario de Dios en el cielo, y apareció el arca de su alianza en el Santuario, y se produjeron relámpagos, y fragor, y truenos, y temblor de tierra y fuerte granizada.Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza; está encinta, y grita con los dolores del parto y con el tormento de dar a luz.
Libro del Apocalipsis. XI,19 y XII,1-2.

El arca de la alianza precede a la mujer vestida de sol en el cielo. Aquí vemos como Dios mueve la historia de la Sinagoga a la Iglesia, de Israel a la Cristiandad. Primero vemos el Arca de la Alianza (símbolo de Israel) en Santuario de Dios en medio de señales sobrenaturales que simbolizan el fin del Pacto de Moisés y después vemos a Una Mujer que posee los siguientes elementos:

  • Vestida de Sol: Símbolo de la Gracia de Dios en Ella.
    La Luna bajo sus pies: Símbolo de su Autoridad sobre Israel.
    Una Corona de Doce Estrellas: Símbolo de su Majestad.
    Encinta y por dar a Luz: Símbolo del cumplimiento de la Verdad.

Bajo estos símbolos únicos y totales se nos revela a Israel y la Iglesia bajo los rasgos de María Santísima. Y se nos queda claro si leemos el Evangelio de san Lucas.

  • María Santísima esta Vestida de Sol: Y entrando, le dijo: "Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo."
    Tiene la Luna Bajo sus Pies: y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí?
    Una Corona de Doce Estrellas: porque ha puesto los ojos en la humildad de su esclava, por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada,
    Encinta y por dar a Luz: Dijo María: "He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra." Y el ángel dejándola se fue.

El misterio de la Encarnación de Dios se explica claramente en como el Apóstol san Juan revela el Nacimiento del Mesías, el cumplimento de las Profecías. María Santísima es la Mujer porque Ella simboliza al Israel fiel que esperaba al Mesías. A ese Israel que fue fiel como Zacarías y Santa Isabel, ese Israel fiel que al escuchar al Señor no dudo en seguirle, pero, también representa a la Iglesia pues ante la incredulidad y apostasía de Israel de reconocer a Nuestro Señor Jesucristo luego de su Muerte y Resurrección, la Mujer saldrá de Israel y se ira al desierto del Mundo Romano.

La Segunda Gran Señal: El Dragón Rojo.

Y apareció otra señal en el cielo: un gran Dragón rojo, con siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cabezas siete diademas. Su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo y las precipitó sobre la tierra. El Dragón se detuvo delante de la Mujer que iba a dar a luz, para devorar a su Hijo en cuanto lo diera a luz.
Libro del Apocalipsis. XII,3-4

Se trata del Demonio en Herodes el Grande, aquel que quiso impedir el nacimiento del Señor por medio de su poder mundano, claro, influido por el demonio. Y se nos describe quien es el:

  • Siete Cabezas: Los Sietes Pecado Capitales.
    Diez Cuernos: Sus Diez Esposas de quien tuvo al menos 15 hijos, de los cuales diez de sus hijos eran sumamente famosos.
    Siete Diademas: Sus Siete Hijos Varones que fueron Reyes.
    Su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo: Se trata de la alianza que tuvo Herodes con el poder del Templo y los grupos religiosos de su época. Herodes quiere detener (por inspiración demoniaca) el nacimiento del Señor.

Tercera y Ultima Gran Señal: El Nacimiento del Mesías.

La mujer dio a luz un Hijo varón, el que ha de regir a todas las naciones con cetro de hierro; y su hijo fue arrebatado hasta Dios y hasta su trono. Y la mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar preparado por Dios para ser allí alimentada 1.260 días.
Libro del Apocalipsis. XII,5-6.

Se cumplen las profecías. Nace el Mesías. El rey Herodes supo por los Magos del Oriente que el Mesías iba a nacer, pero le engañaron y no volvieron a él para decirle donde nació el niño. La Sagrada Familia huye a Egipto a un lugar preparado por Dios, lejos de la Jurisdicción de Herodes que tristemente desata la matanza de los inocentes. Después de esto el Señor es llevado a Dios y su Trono, (la consagración por medio de la circuncisión) y la Mujer esta en el Desierto comiendo y bebiendo de Dios.

El Fracaso de Satanás.

Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron con el Dragón. También el Dragón y sus Ángeles combatieron, pero no prevalecieron y no hubo ya en el cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Ángeles fueron arrojados con él.
Libro del Apocalipsis. XII,7-9.

Después se nos revela la identidad del Dragón Rojo como el Demonio, aquel que seduciendo a Herodes, intento detener el nacimiento del Mesías. Se nos revela su origen como Ángel de Dios, como cae de la Gracia, combate contra Dios, no prevalece y es arrojado El y sus seguidores a la Tierra.

El Mesías y la Redención.

Oí entonces una fuerte voz que decía en el cielo: "Ahora ya ha llegado la salvación, el poder y el reinado de nuestro Dios y la potestad de su Cristo, porque ha sido arrojado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba día y noche delante de nuestro Dios. Ellos lo vencieron gracias a la sangre del Cordero y a la palabra de testimonio que dieron, porque despreciaron su vida ante la muerte. Por eso, regocijaos, cielos y los que en ellos habitáis. ¡Ay de la tierra y del mar! porque el Diablo ha bajado donde vosotros con gran furor, sabiendo que le queda poco tiempo.
Libro del Apocalipsis. XII,10-12.

El Mesías ha nacido y cumple con su Misión Profética y Salvadora. La Vida, Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo se nos muestra con claridad, el Demonio es vencido por la Sangre del cordero y esa sangre le impide al demonio seguir acusándonos ante Dios, el cargo con los Pecados del Mundo y fueron perdonados por y en la Gracia del Señor, sin embargo de demonio, furibundo, sabe que le queda poco tiempo, y en la Tierra no tiene mas opción que tentar a la humanidad para alejarla de la Gracia y así negarles la Salvación.

La Iglesia y la Evangelización.

Cuando el Dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la Mujer que había dado a luz al Hijo varón. Pero se le dieron a la Mujer las dos alas del águila grande para volar al desierto, a su lugar, lejos del Dragón, donde tiene que ser alimentada un tiempo y tiempos y medio tiempo.
Libro del Apocalipsis. XII,13-14.

Con el éxito de la Redención, la Mujer es enviada al desierto en dos alas, lejos del Dragón, es decir, la Evangelización debe ser llevada al desierto espiritual del mundo clásico, lleno de paganismo. Las dos alas de águila enormes no son otra sino la Escritura y la Tradición Apostólica.

Entonces el Dragón vomitó de sus fauces como un río de agua, detrás de la Mujer, para arrastrarla con su corriente. Pero la tierra vino en auxilio de la Mujer: abrió la tierra su boca y tragó el río vomitado de las fauces del Dragón. Entonces despechado contra la Mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús. Yo estaba en pie sobre la arena del mar.
Libro del Apocalipsis. XII,15-18.

El demonio, infeliz ante el éxito de la predicación Apostólica, vomita un rio de agua para arrastra a la Mujer con su corriente, con sus blasfemias, pero la tierra se abrió entre el Dragón y la Mujer, evitando esto. Al ver que la Mujer no seria NUNCA destruida, entonces se lanza contra los primeros cristianos, contra los Apóstoles. San Juan bien sabe que se refiere al martirio de sus hermanos, pues el esta sobre la arena del mar, símbolo de Patmos, para ser testigo de todo ello.

San Juan concluye el Capitulo XII del Apocalipsis revelando el Misterio del Nacimiento del Señor y el Martirio de sus Hermanos. Ya San Juan ha explicado el Misterio de Dios, los Misterios del Bien y la Santidad, ahora en San Juan explicara en el Capitulo XIII, el Misterio del Mal en el Mundo.